lunes, 11 de agosto de 2014

¿Qué hacer en verano en Sevilla?

Fotografía cedida por Fernando Ruiz / @ferufab

INFORMA: Irene Rodríguez / @Rguez_Irene
FOTOGRAFÍAS: Fernando Ruiz, Damián Liroa y Antonio Falcón

Sevilla es una ciudad que en verano “busca la sombra”, que se caracteriza por sus altas temperaturas en las cuales, la gente se refugia en casa debajo del aire acondicionado hasta que “pase esta caló” además de tener siempre a mano un buen abanico para soportar ese bochorno agotador. Pero quedarse en Sevilla en verano también tiene sus ventajas y aquí os proponemos algunas de ellas.

La capital andaluza, es un lugar en el que su ciudadano no se cansa de pasear, de buscar ese rinconcito en el que enamorarte mirando hacia los lados y perderse en ellos una vez más. En verano, la ciudad adquiere vida una vez que se esconde el temible Lorenzo y es el momento perfecto para poder disfrutar de ella.

Sevilla dispone de conciertos al aire libre, tratándose de una buena alternativa a lo de siempre. El flamenco y otros estilos albergan por las plazas más populares de la ciudad llegando a ser una gran oportunidad de estar en contacto con nuestra cultura y nuestras raíces.

Los más cinéfilos podrán disfrutar de algo bastante común y tradicional en las ciudades como son los cines de verano. Todos los días excepto los lunes en la Trasera del Pabellón Real a partir del día 1 de julio y hasta el día 7 de septiembre a las 22:15 h.

 Fotografía cedida por Antonio Falcón

Para los que se decanten más por la música, el Real Alcázar de Sevilla pone a disposición de los sevillanos el programa “Noches en los jardines del Alcázar” todo un plan que posibilita, aunar la visita de los jardines del Alcázar con toda una serie de conciertos que se deslizarán por las diferentes edades musicales de las la propia sede ha sido testigo.

Si por lo contrario, únicamente quiere dar un paseo y disfrutar, yo tengo ya mi ruta hecha. Qué mejor que comenzar por la plaza de San Lorenzo al caer la tarde, llegar hasta la plaza de La Gavidia y hacer la primera parada en el bar Dos de Mayo. Seguir hasta el centro, albergar por sus calles hasta llegar a la avenida de la Constitución en la que en una de sus bocacalles podrás encontrar el restaurante Los Coloniales. Exquisito lugar para cenar en el que de forma económica quedarás satisfecho y con las ganas de volver, al cual llaman “tapas” a esos “platazos” como la súper hamburguesa de antílope o esa “tostá” de jamón con salmorejo y huevos fritos de codorniz. Espectacular. 

 Fotografía cedida por Fernando Ruiz / @ferufab

¿Después de cenar qué mejor manera que bajar la comida que paseando? He aquí cuando llega el momento de enamorarse de Sevilla… Perderse por el barrio Santa Cruz. Comenzar por la calle Mateos Gago y contemplar una de las mejores vistas de la Giralda e ir adentrándote en sus callejones de adoquines y sus paredes blancas. Sus estrechas calles hacen de este lugar uno de los rincones más encantadores de Sevilla. Salir de aquí y adentrarte en otro mundo, Los Jardines Murillo, el azul de sus azulejos y la grandeza de sus árboles lo hace único.

Para terminar la noche y tomar una copa, puedes elegir los numerosos pubs que te encuentras en La Alfalfa, chupitos, copas, música y ciento de personas de diferentes nacionalidades aunque si de verdad quieres ir a un bar puro sevillano y en el que el cante y el arte no va a faltar ese es el Chiringuito, en la misma Alfalfa, nada más tienes que entrar y ver sus fotos y todas las personas que han pasado por allí, para saber que “ese es el bar de Sevilla”. 

 Fotografía cedida por Damian Liroa / @Damian_Liroa

Y esto solo es una pequeña idea, una ruta más, pero sin dejar atrás, el barrio de Triana y el Altozano, la calle Betis o tomar unas tapas por la calle San Jacinto y luego disfrutar del río Guadalquivir por el puente de Triana. Subir a las Setas de la Encarnación y sentir que Sevilla, ella sola, se presenta ante ti. 


  Fotografía cedida por Fernando Ruiz / @ferufab

En Sevilla no se mira el reloj, no hay prisa por tomarse la penúltima, por invitar a una ronda a gente que no conoces de nada pero como buen sevillano quieres que se sienta, como el mejor en tu ciudad. Sevilla te invita a vivir, a sentir… por su gente, su generosidad y su forma de ser.

Porque Sevilla no se puede explicar, hay que vivirla.  




                                         Fotografía cedida por Damian Liroa / @Damian_Liroa

3 comentarios:

  1. ¡¡Simplemente GENIAL!! Un buen recorrido por, sí señor. Habrá que seguir los pasos de Irene.

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  2. Gracias Aida. En poco la estaremos dando juntos. Se acercan tus vacaciones. Besos

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