jueves, 27 de marzo de 2014

El Gusanito Lector. Más que una librería



Fotografía @jllpaneque



El pasado sábado la librería El Gusanito Lector organizaba una actividad cultural en torno al mundo infantil. Esperanza Alcaide abría las puertas de esta librería de la sevillana calle Feria al proyecto “micrujo”, una idea de José Andrés Domínguez.  Con “micrujo”, José Andrés extrae el microrelato que tiene guardado el dibujo. Nos cuenta Esperanza Alcaide que se les ha pedido a los niños asiduos al gusanito y a través de las redes sociales que trajeran durante la mañana un dibujo. Una vez allí y tras una charla de unos diez minutos con José Andrés, el creativo docente recoge la esencia e inquietudes que los niños y las niñas aportan a sus dibujos y que ayudará a transformar en unos días en poesías, pequeñas obras teatrales, microcuentos o canciones. “Cada dibujo lleva algo dentro” y a través del conocimiento de sus inquietudes plasmadas en la obra gráfica, el artista podrá encontrar que es lo que esconden. Nos cuenta José Andrés que él muestra a los jóvenes diferentes tipos de obras infantiles y les cuestiona sobre cómo ven ellos y ellas acabados sus dibujos. Unos prefieren el desarrollo del diálogo entre personajes, otros la clásica narración del cuento en tercera persona, otros la poesía o canción para hacer más musical la obra pero todos les han puesto mucha ilusión. Dieciséis niños y niñas se han acercado al Gusanito Lector para hablar de sus dibujos, para ponerle nombre a sus personajes, para darle un alma que José Andrés materializará en unos días.



Fotografía @jllpaneque



Comentaba el artista que no hubiera desarrollado la actividad en ningún otro sitio que no fuese El Gusanito Lector. "Era una forma de agradecer la labor altruista de Esperanza con el club de lectura en el que está mi hija". Esta librería posee un encanto especial y no muestra interés en competir con las librerías especializadas en la venta de “best sellers”. Esperanza Alcaide, su gestora y vicepresidenta de la asociación Feria del Libro de Sevilla, nos comenta que en los diecinueve años que lleva abierta la librería en el barrio, ésta ha evolucionado. En la actualidad vende prensa diaria y guías de ocio y viajes junto a libros de autores que se alejan de los superventas, aunque éstos también estén presentes en las estanterías de ésta acogedora librería. 



 Fotografía @jllpaneque


El Gusanito Lector al igual que la mayoría de las librerías en Sevilla se ha especializado y Esperanza Alcaide ha canalizado la especialización hacia los más pequeños. La librería cuenta con una amplia oferta en libros infantiles y en ese sentido se ha convertido en un referente de búsqueda de literatura infantil y juvenil. Esperanza como librera, pertenece al club de libreros Kiriko. Éste club lo conforman diferentes librerías españolas especializadas en la literatura infantil y juvenil. Pero Esperanza no se ha quedado aquí. En El Gusanito Lector la difusión cultural, en su más amplio sentido, rebosa por sus puertas. Además de potenciar dos clubs de lectura, uno entre los más pequeños y otro entre los adolescentes que reseñan libros y realizan publicaciones a través del blog



Fotografía @jllpaneque



Esperanza da cabida entre libros a otras manifestaciones artísticas que programa semanalmente. Su inquietud por la cultura y su carácter solidario nos brinda la oportunidad de disfrutar en un entorno cultural de presentaciones de libros (algunas de ellas de círculos exclusivos), y de conciertos acústicos de cantautores como el que hoy jueves ofrecerá la cantautora hondureña Rosario Rodríguez a las 21.00 horas, o la presentación del libro "El insólito viaje del samurai Hasekura" de José María Sánchez-Ros el próximo 2 de abril a la misma hora. Os esperan.     



Fotografía @jllpaneque



jueves, 20 de marzo de 2014

Carmen Mudarra: “En todos los personajes sin ser ninguno”



Fotografía @jllpaneque


Carmen Mudarra Vela es una de las doce mujeres, madres y escritoras que han dibujado con palabras diferentes relaciones de madres con sus descendencias. En “Mujeres y Madres: 12 vidas para compartir” podemos encontrar historias de entrega, de esperanza, de pasión, de intriga, de miedo, de amor, de desamor y no porque los relatos toquen géneros literarios con estas temáticas, sino porque los sentimientos son la clave sobre la que inciden para crear bellas historias desde el punto de vista narrativo y difíciles realidades con la que cualquiera verse retratado.

Carmen Mudarra publica su tercer relato en este tercer libro compilado por Manuel Salgado Fernández y Mª Carmen Rodríguez Matute, presidente y vicepresidenta del Club de Escritores PER SE. Rosa fuerte es el título de su historia inventada con una gran dosis de realismo trabajado en cada detalle. Rosa fuerte narra el momento que vive una madre en el instante que su hija adolescente le comunica que se ha quedado embarazada. Carmen desarrolla de manera profunda y desde puntos de vista diversos la situación, buscando la forma más humana de afrontar el hecho con los sentimientos a flor de piel.


 Fotografía @jllpaneque

Carmen no se considera escritora aunque sea escritora Per Se. Desde su infancia expresaba lo que sentía en negro sobre blanco para después guardarlo en cajones al olvido del tiempo. Ahora escribe motivada en los ratos que araña al día tras trabajar y dedicarse por completo a la crianza de su hijo.

Estas escritoras Per Se regalan un abanico de sensaciones al que se acerca a su lectura y garantizan momentos emotivos narrados con afecto y mucho sentimiento. Desde el prólogo de Susana Herrera Márquez que cariñosamente nos introduce en los relatos de estas doce madres Per Se con su gran relato de amor Lágrimas de vida, hasta cada una de estas historias de la vida.      

Fotografía realizada por Jesús Salas


¿Cómo se monta el Club de Escritores PER SE?
Esta idea parte del que es el compilador de nuestras obras, el psicólogo Manuel Salgado Fernández. Él se plantea que le gusta cómo escribimos y que es una pena que como en mi caso guarde las cosas que escribo en los cajones. Yo jamás en la vida me había planteado que nadie leyera nada de lo que yo he escrito. Nunca. Y además, me daba una vergüenza horrorosa porque yo (por lo menos) soy de las que piensa que poco interés puede tener lo que yo escriba para nadie [se ríe]. Pero a él un día se le ocurrió la idea de reunirnos a gente que le gustaba como escribíamos y hacer algo en común. Nos lo planteó y como somos todos un poco “locos” en ese sentido, dijimos que sí. Guardamos las vergüenzas, sacamos los textos y empezamos a trabajar.

¿Quiénes lo formáis?
Ahora mismo somos 47 miembros en el club. Va aumentando por días porque conforme vamos sacando publicaciones la gente que viene le gusta y es muy enriquecedor.

¿Qué experiencia previa teníais?
Cero. Que yo sepa ninguno había escrito nada antes, [pensativa]... excepto Saskia que había publicado algo de poesía pero los demás cada uno tenemos nuestra profesión y nunca nos habíamos planteado ponernos a escribir.

Estáis en momento de promoción de la tercera obra del club de escritores ¿cómo se está vendiendo?
Las ventas para ser sinceros, cortitas [risas]. Nonos conoce nadie, es muy difícil hoy en día ya que hay muchísimos autores. Yo comencé a sorprenderme mucho cuando empiezo a publicar hace cuatro años y comienzas a prestar más atención y en mi trabajo había muchos compañeros y compañeras que había publicado algún libro e incluso se había atrevido con la autoedición. Esa es una de las barreras más fuertes. Tú puedes escribir, pero conseguir que una editorial se interese, es muy complicado. Nosotros por ejemplo, para el primer libro estuvimos un año tratando que una editorial se interesase y lo publicara. [...] En el segundo hicimos autoedición. Es una barrera que te quitas. Nosotros no lo hacemos para ganar dinero. Es algo que nos gusta, que nos hace disfrutar muchísimo en todo el proceso. Desde la idea ya estás disfrutando. Cuando lo plasmas y lo lees te das cuenta de que nos está tan mal y en la presentación es cuando nos lo pasamos genial [risas]. 


Fotografía @jllpaneque

Aunque no se esté vendiendo mucho ya estáis con la segunda edición.
Hemos tenido la suerte de encontrar un mecenas fabuloso que nos hizo una primera edición, pequeñita, de doscientos ejemplares y nos sorprendió que en la presentación se vendieron los doscientos libros y conllevó sacar la segunda, porque seguimos de promoción. 

En “Mujeres y madres: 12 historias para compartir” 12 mujeres narráis 12 relatos cargados de sentimientos y sensibilidad. ¿De qué fuentes bebes para inspirarte?
Propias todas, autobiográficas ninguna. Cada una de nosotras tiramos de sentimientos. Hay relatos en los que tienes que documentarte […] pero lo que es la historia en sí la extraes de vivencias, de pensamientos, de sentimientos… Me gusta mucho porque  ahora cuando los releo me encuentro en todos los personajes sin ser ninguno de ellos [risas]. 

 Fotografía realizada por Jesús Salas

¿Hablar de sentimientos hace que el lector se sienta más identificado con la historia?
Seguro. Sin ser profesionales de la escritura cuando inventas lo haces desde dentro. Cuando tú le hablas a alguien de sentimientos es muy fácil tocarle la fibra. Son historias inventadas con los pies en la tierra. Historias que podrían ser perfectamente reales. En mi historia de este libro de “madres” para los personajes principales, la madre y la hija, he unido todo lo que yo he querido ser como madre, todo lo que quería que mi madre hubiera sido, lo que no me ha gustado, lo que no me gusta de mi y así es facilísimo hacer que la gente llegue a él. Realmente podría ser yo, o podría ser mi vida o podría ser la tuya. 

En tu relato “Rosa Fuerte” hablas de muchos tipos de relaciones: madre – hija, primer amor, de ex – parejas, homosexualidad, embarazo en la adolescencia. ¿Cuál de ellas desarrollas de una forma más fluida? ¿Por qué?
Todas y son todas complicadas. Porque quiero decir tantas cosas en tan poco texto que hace que mis personajes sean poliédricos, muy complejos porque quiero decirlo todo desde todos los puntos de vista posibles, pero no puedo hacer “Lo que el viento se llevó” en dieciséis páginas [risas]

¿Sobre qué estás escribiendo ahora?
En este momento no estoy escribiendo pero lo último que he escrito recientemente es un cuarto relato para un cuarto libro que tenemos en mente que trata sobre el duelo. Y la verdad es que ha sido tremendamente doloroso, con lo cual he decidido parar un poco, tomar un poco de aire y le he pedido a Manolo, nuestro compilador, de seguir con esto que se echa de menos el escribir pero vamos a cambiar un poco de tema ya que estas cosas nos hacen mirar muy hacia adentro y duelen, a mi me duelen [entre risas]. Yo lo paso mal cuando escribo. A veces que tengo que dejarlo y lloro y releo y veo que no puedo poner cosas porque soy demasiado yo y no quiero que mi relato sea autobiográfico.

Fotografía @jllpaneque

¿Es entonces el escribir la mejor de las terapias?
Totalmente. Yo era una niña de 9 o 10 años cuando empecé a escribir pero siempre, como te he dicho, dejándolo en los cajones. Yo necesito verbalizar. Mi cabeza va como una olla exprés, mis sentimientos fluyen a tal velocidad que no puedo abarcar tanto como quiero por lo que al escribirlo me permito volver a leerlo y reflexionar sobre si es eso lo que realmente siento. Sí, para mí es una terapia perfecta. Y no necesito que me lea nadie. Lo escribo y lo guardo [entre risas].     

¿Te has planteado en escribir algo más extenso e intentar publicar sola?
No me lo he planteado y te insisto, yo escribo para mí. No tengo la necesidad de inventarme algo y una autobiografía no voy a escribir. Escribir es mi terapia, el sacarme yo, el escucharme y el decirme para, gira o sigue.

¿Sobre qué te gustaría escribir?
[Pensativa] Este último relato publicado me ha dado la oportunidad de escribir sobre algo que es fundamental para mí, la maternidad. La relación con mi hijo es para mí vital. Quizás un tema que me falta por plantearme es la relación con el resto de seres humanos. Como tengo grandes fallos, lo reconozco, y tras escribir sobre otras parcelas personales, necesitaría escribir de mi relaciones con los demás ya que me considero una persona muy sencilla en el sentido de no tener dobleces y eso me causa muchos problemas. Es muy fácil hacerme daño y aprovecharse de mi naturalidad en las relaciones humanas. 

Además del club ¿Escribes en otros sitios como blogs, revistas digitales,....?
No dispongo de tiempo. Ya quisiera

¿Hace falta un mecenas para publicar y distribuir?
Para nada. Hace falta tener muchas ganas, un poquito de dinero [risas], pero un poquito, tampoco mucho. Nosotros ya nos estamos autofinanciando. Es cierto que hubo una inversión inicial pero al ser muchos en el club, resultó viable y a raíz de ahí nos vamos autofinanciando.  

Fotografía @jllpaneque



jueves, 13 de marzo de 2014

Tras la denuncia hay alternativas

Fotografías @jllpaneque


Con motivo del día internacional de la mujer, los diferentes medios de comunicación se hacían eco de los estudios y estadísticas con relación a la violencia de género que sufren las mujeres europeas. Se ha encuestado a 42.000 mujeres de 28 países europeos a través de la Agencia de Derechos Fundamentales de la UE (FRA). Es escalofriante ver que un tercio de las féminas entre 18 y 74 años han sufrido violencia física o sexual y de éstas solo una de cada tres denuncia sus agresiones, un 14% de las víctimas. Con los estudios y estadísticas lo que se pone de manifiesto es el abuso de los derechos humanos que ni la Unión Europea ni ningún estado democrático puede hacer caso omiso y deberían saltar las alarmas en las diferentes instituciones. Quizás éstos temas pueden parecer que no nos afectan directamente cuando no conocemos ningún caso cercano, pero el que solo un 14% efectúe su denuncia nos da a conocer que un 86% está sufriendo en silencio algún tipo de agresión. En los medios de comunicación y en las campañas de difusión de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado se nos informa que las denuncias a través del número de teléfono 016 son gratuitas y no deja rastro en la factura telefónica, aunque hacerlo continúa siendo una asignatura pendiente.


Fotografías @jllpaneque


La Nueva Generación Perdida ha estado hablando con Soledad Vila, presidenta de la asociación Terrogénero, (Terrorismo de Género), que en Los Palacios -Villafranca (Sevilla) desempeña una gran labor al acompañar y asesorar a las mujeres víctimas de ésta lacra social y que han sido lo valientes como para salir del negro pozo del silencio y el maltrato. 




Fotografías @jllpaneque 


¿Cómo surge la idea de fundar “Terrogénero”?
Tenía ganas de montar una asociación así desde hace muchos años, pero no encontraba a esa persona que se vinculara con el tema. Las personas que tenía a mi alrededor tenían muchos prejuicios y yo no quería alguien así, quería alguien que si se tiene que ayudar a una mujer se le preste la ayuda. Yo comprendo que en un pueblo tan conservador como es Los Palacios es más difícil y de echo he estado cinco años hasta que he encontrado a las personas serias y comprometidas que se han implicado.

¿Cuál es la principal actividad que desarrolla “Terrogénero”?
Terrogénero tiene muchas funciones vinculadas directamente con el maltratato en todos los ámbitos. Tanto laboral, como sexual, como escolar, pero su función principal es la violencia de género.

¿Con cuántas socias o socios cuenta?
Somos tres socios fundadores. El abogado José Antonio Madero, el maestro Luis Villaescusa y yo. Las mujeres al día de hoy no pueden pagar una cuota. Nosotros las ayudamos dentro de lo que la asociación puede. Ahora mismo no es momento de cobrarles cuotas. Estamos haciendo un censo y ahora tendremos unas 25 o 26 mujeres pero en Los Palacios hay muchísimas más.

¿Cómo os financiáis? ¿Tenéis subvenciones?
[Se ríe] No tenemos ninguna subvención. La asociación lleva dos años funcionando y trabajamos gracias a las empresas de Los Palacios que nos van dando cosas o les vamos pidiendo favores. Ahora mismo las actividades más importantes de la asociación son la concienciación y la formación. Hemos formado a Protección Civil, vamos a formar también a la Policía Local pero lo que hace que Terrogénero se financie es mediante las empresas del pueblo que una aporta un dinero, otra aporta los carteles y así. Cada vez que voy a un acto, voy con veinte logos.  

¿Sólo ayudáis a mujeres que hayan sufrido violencia de género?
Sí de momento sí. Pero hay otras mujeres que vienen a solicitar otro tipo de ayudas y si se le puede ayudar, se les ayuda. De todas formas hay otras asociaciones en el pueblo que se dedican a eso pero estamos todas en contacto.

En cierto modo esta pregunta sobra ¿Porqué formar una asociación para las víctimas de violencia de género?
[Silencio] Yo no suelo contestar nunca a ésta pregunta. Yo conozco personas que han creado asociaciones que no tienen vínculo ni nada que ver con la problemática que defienden o representan. Yo si decidí formar ésta es porque tuve una experiencia.


 Fotografías @jllpaneque

No te voy a preguntar por la experiencia en sí, pero me gustaría saber ¿cómo se sale de una historia de violencia?
[Emocionada] Tocando fondo. Sinceramente. No hay opciones. Cuando estás metido, por mucho que hay a nuestro alrededor, no hay opciones para ti. Pero cuando tocas fondo y alguien en un hospital o en cualquier lado te mira de otra manera, pegas el bote. También tienes que abrir los ojos, pero tiene que haber un episodio final que te hace saltar la chispa y entonces es cuando pegas el bote. Que puede ser a los cuatro años, o puede ser veinte o incluso algunas que están toda la vida. 

Al vivir en un pueblo y ser un entorno donde todo el mundo se conoce, ¿se encuentra más fácilmente ayuda o se estigmatiza más a la víctima?
Depende de la persona y de los vecinos. Realmente depende. Es muy importante le entorno del vecindario. Hay personas que son muy crueles y aprovechan para estigmatizarte aunque la mayoría lo que hace es callar. 

¿Qué le dirías a las mujeres que es estos momentos están viviendo una situación parecida?
Las que nos preocupan son las que están calladas. Las que no se lo cuentan a nadie, ni a su madre, ni a su padre, no lo sabe nadie. Que peguen el bote y que vayan y denuncien que detrás de la denuncia hay mucho más. [...] Pero que no lo aguanten. Mi lema es “Mujer, tú vida tiene valor. No eres un objeto, no perteneces a nadie”. Yo les digo que peguen el salto y si tienen que ir a una asociación que vayan, que se lo cuenten a su madre, pero me preocupan las que están en silencio y no se lo cuentan a nadie.

¿Qué puede hacer alguien que tenga conocimiento de que se está produciendo una situación de violencia además de llamar a números que no deja rastro como el 016?
[Sin dudar] Informar y no abandonarla. No cometamos el fallo de ir varias veces y llagar a decir “a mí no me lo cuentes más”. Esa no es la solución. Al contrario, la estás perjudicando. Hay que informar a quien sea,... a una asociación, a la Guardia Civil, de forma anónima llamando al 016, pero que no la abandone, que se la visite más días a la semana y no caer en el típico rol de “no me cuentes más problemas que después vuelves”. Eso es dejarla sola. 



Fotografías @jllpaneque 

Además de la formación ¿qué más proyectos tiene “Terrogénero”?
Tenemos muchos. Además de ayudas a la mujer, agentes en igualdad, talleres, etcétera. Ahora tenemos un proyecto sobre defensa personal del que hemos hecho un pequeño amago y salido bastante bien, ha gustado mucho y ha sido muy bonito y hemos presentado el proyecto para ver si alguna fundación o alguien nos lo subvenciona y empezamos en esta línea a trabajar.

¿Qué se podría mejorar en el proceso de denuncias por el que pasan las víctimas?
Hay una barrera de momento insorteable que es la sensibilidad que no te encuentras en los juzgados. Una mujer denuncia y te hacen la investigación en la Unidad de Violencia de Género de Sevilla, con estudios psicológicos (tanto a ella como a él) y la mujer sale machacada por todos lados. Se la somete a presión para ver si está o no mintiendo. La mujer ve complicada su situación en el momento de establecer la denuncia y la Guardia Civil, por protocolo, así se lo hace saber ya que el maltratador se encuentra descubierto y cuando ella sale del cuartel se encuentra sola. Ahora a luchar en los juzgados.

¿Hay alguien dentro de éste proceso a quien te gustaría agradecer su labor?
Por un lado a la Guardia Civil de Los Palacios Villafranca que es maravillosa, de hecho tiene un agente de violencia de género y demuestran bastante interés. La Policía Local colabora con ellos y una vez que las mujeres han realizado las denuncias ellos las ponen en contacto con nosotros y ya voy yo a su casa a prestar apoyo y orientación. También por otro lado al ayuntamiento, ya que la concejala de igualdad está muy volcada.

Cada vez se hacen públicos más casos de violencia de género en chavalas muy jóvenes. ¿Lo verificáis desde vuestra asociación?
Cada vez más. Nosotros sí lo hemos detectado. Yo pienso que las nuevas tecnologías no ayudan a la protección. Tampoco las informaciones que se dan en los medios de comunicación. Yo me indigno con la cantidad de datos que se aportan. Estamos dando ideas, estamos dando mucha información innecesaria. [...] Cuando tú has pasado por una situación como ésta te preguntas el porqué están ofreciendo los medios tanta información. Están entrando en el morbo.  


























Fotografías @jllpaneque 



jueves, 6 de marzo de 2014

Antonio Amuedo. Mucho que decir y cantar

Fotografía @jllpaneque 


Hace ya 20 años Antonio Amuedo coge una guitarra y comienza a rasgar las cuerdas buscando los acordes de las canciones de cantautores como Silvio Rodríguez o Pablo Milanés. La constancia no ha sido su virtud más conciliadora en ésta relación de amor que ha tenido con la música, no obstante, los periodos de apatía o el tiempo que requiere criar a tres descendientes no ha impedido que en sus momentos de creatividad abrazase a la musa de las seis cuerdas y compusiera con la mirada puesta en los demás. Antonio lo tiene bastante claro, él no es un fenómeno de masas ni lo pretende ser, él solo quiere cantar y contar lo que sucede a su alrededor. Antonio es una persona que no puede pasar de puntillas ante las injusticias sociales con las que desayunamos en las páginas de los periódicos o en las redes sociales. Su compromiso con la sociedad inspirador de las letras de sus canciones se ha materializado en un proyecto solidario. “Desaprendiendo” es el nombre de éste proyecto musical que verá próximamente la luz gracias a la colaboración personal a través de una web de financiación multitudinaria (crowdfunding) donde la participación de amigos y anónimos ha hecho posible que Antonio logre la recaudación planteada para la producción parcial del disco. “Desaprendiendo” es el segundo trabajo editado de Antonio Amuedo y en esta ocasión los derechos del mismo se los ha cedido a Intermón Óxfam, una Organización No Gubernamental con la que está vinculado y quién se beneficiará de la venta del mismo. Antonio modestamente nos cuenta que no ha realizado muchos conciertos pero los más de treinta ofrecidos el pasado año le hacen ser un conocedor de las tablas de los pequeños escenarios andaluces y de cómo llegar al interior de los que le escuchan.

Fotografía realizada por Antonio Falcón

¿En qué concierto te has sentido mejor?
Yo creo que en el que he retomado mi contacto con la música. El que hicimos en diciembre de 2012 que fue en homenaje a la asociación de la E.L.A. (Esclerosis Lateral Amiotrófica) de Andalucía y en su beneficio ya que mi cuñado murió de ELA, entonces yo creo que es en el que mejor me he sentido primero porque retomaba la música después de varios años habiéndola tenido apartada por los niños y la falta de tiempo y la retomaba organizando ese concierto, siendo el promotor, implicando a muchos músicos, y hubo mucho público y tuvo mucha repercusión para la asociación, no solo en el sentido económico, sino en el sentido que se contribuyó a dar a conocer la enfermedad.

¿En cuál peor? ¿Porqué?
Pues mira, yo creo que también ha sido este mismo año. Desde hace un año precisamente (el 23 de febrero) hago un tributo a Silvio Rodríguez con Joaquín Calderón, que ha tenido bastante éxito, hemos ido por varios sitios, y ahora el 16 de marzo iremos a Madrid. Fuimos a Málaga y Granada en mayo del pasado año y en Granada estuvimos en La Tertulia que aunque con poca gente era un sitio agradable donde te atienden bien, pero en Málaga estuvimos en un sitio donde no solo no es agradable porque no te atiende nadie, sino que además no había nadie prácticamente, había seis personas que habían venido porque eran amigos nuestros. Entonces te sientes bastante mal por eso, pero yo creo que le pasa a mucha gente y además en este tema de la canción de autor hay muchas ocasiones que llegan a cantar sin que haya nadie. A medida que más toque más posibilidades tengo de que me pase ya que la canción de autor es una cosa minoritaria.

 Fotografía realizada por Antonio Falcón

¿De qué fuentes bebes para inspirarte?
Si te refieres al contenido de las canciones decirte que mis canciones tienen contenido social, algunas hablan de amor, pero normalmente todas tienen contenido social. A mí me preocupan las cosas que pasan a mi alrededor y escribo sobre eso normalmente. Prácticamente todas las canciones tienen contenido relacionado con las cosas malas que le ocurre a la gente, porque las buenas como las canciones de amor, se pueden considerar lo más positivo, pero en mi caso son las menos. 

¿La temática social hace que tus letras calen más?
[Decidido] No, hace que calen menos. [Risas] Estoy convencido de que la temática social en este momento que vive nuestra sociedad y nuestro país, con esta crisis inventada, ésta temática de la canción de autor reivindicativa vuelve a tener más sentido. Para mí nunca lo perdió. El disco que tengo entre manos comienza con una canción que se llama “lo cotidiano”, que habla de porqué hago yo canciones y respondo a alguna gente, cantautores, que ven mi temática de rollo social como anacrónico, como algo pasado y yo creo que fue muy importante y hubo gente que murió por eso como Víctor Jara, que lo mataron por lo que cantaba, y yo lo canto en ésta canción, “vi gargantas que yacían, canto lo que les debía”. Aquí ha habido una época de bonanza de mentira, porque en otros sitios hay gente que se sigue jugando la vida con las cosas que dice y con lo que canta y nosotros aquí ahora mismo tenemos mucho que decir y cantar en contra de la situación que vivimos, para pelear contra eso o para dar a conocer esas cosas  mediante la música o las letras de las canciones. Yo creo que eso hace que la gente ahora se sienta un poco más identificada pero durante un tiempo la gente no se ha sentido identificada con estos temas y sí con otros más banales, más recurrentes y sin duda alguna, más comerciales sabiendo que una tras otra todas las canciones van de lo mismo. 

¿Porqué cantarle a lo cotidiano y no al amor o al desamor?
Al amor yo al menos no me inspirado como para cantarle. Creo que eso pasa más precisamente cuando te falta. Yo creo que es más fácil que se hagan canciones al desamor que al amor. [Irónico] Yo afortunadamente no he tenido que componer desde ese punto de vista en muchas ocasiones, con lo cual no me han salido muchas canciones de desamor, que creo que es más fácil hacer canciones de desamor que de amor. Hay una canción de referencia de Silvio, “Ojalá”, que es una canción de desamor. Creo que salen mejores canciones cantando al desamor que al amor. Yo he estado enamorado y me he sentido querido como para no tener que escribir desde esa perspectiva así que he estado más volcado en el contenido social, porque es lo que yo he mamado en la música, en ese tipo de música.  Me llamó la atención de este tipo de música el ver a un tipo sólo con voz y guitarra y por eso cogí una guitarra y me atrajo la música de Silvio. Él estaba relacionado directamente con la revolución cubana y con ese momento concreto. [...] Eso es realmente lo que yo he mamado y es eso lo que me sale. Yo no pretendo ser adalid de nada, es lo que escribo porque es lo que me sale de dentro. Yo no me voy a dedicar a esto ni voy a vivir de la música así que hago lo que me da la gana, le agrade más o menos a quien sea. No tengo que vender discos.

Fotografía realizada por Antonio Falcón

¿Porqué plantear un proyecto de financiación multitudinaria o crowdfunding?
El disco lo estaba grabando con mis recursos económicos y la ayuda de amigos que se implicaban en el proyecto como el propio Ismael Sánchez que es el productor musical. Lo grabamos en su estudio. Él además de ser el guitarrista que me acompaña y que nos conocemos desde que estábamos en la guardería, con su ayuda en la grabación del disco lo que queríamos era sacarlo en soporte físico ya que lógicamente nos agrada tenerlo en mano. Si no hubiese sido posible lo hubiéramos colgado en las plataformas digitales como Spotify, Itunes y ahí estaría grabado. El hecho de hacer crowdfunding es para financiar esa fabricación porque yo no me puedo permitir eso y de ahí el darle la vuelta a la idea de hacer algo solidario y que la gente me ayudara y el resultado del disco fuese solidario ya que yo no concibo el crowdfunding únicamente para beneficio propio. No voy a fabricar una cosa mía para venderla. Tengo mi pelea interna si utilizar la forma de financiación del crowdfunding para hacer un vídeoclip o para hacer cualquier otro proyecto cultural pero desde luego hacerlo para sacar un producto que tú luego vas a vender y de la que te vas a beneficiar, no lo tengo claro. Tengo ahí un conflicto de conciencia que creo que yo no habría hecho el crowdfunding si no era con una finalidad solidaria.

¿Porqué con la ONG Intermón Óxfam?
Yo colaboro con Intermón al igual que con Médicos sin Fronteras desde hace tiempo y tenía claro que quería que fuera una cosa benéfica pero no tenía claro para qué. Tengo gente cercana que está en otros círculos y con proyectos concretos y dudé en hacerlo con ellos porque sí tenía claro que lo que sacáramos fuera algo palpable y que yo supiera que repercutía directamente sobre la ONG. A través de un cantautor de Pamplona, Javi Martín que sí se ha autofinanciado totalmente su disco porque se lo ha podido permitir, y ha cedido los beneficios de la venta a Intermón ya que tiene mucho vínculo con ésta ONG. Hablando con él un día decidí que fuera Intermón que es una ONG que siempre me ha dado confianza y que además era socio hace tiempo y tienen una plataforma en su web a través de la que se puede vender el disco porque se crean unas iniciativas solidarias (al igual que en otras ONG) donde la gente puede ir metiendo dinero, en éste caso un mínimo de 10 euros que será el precio del disco, y el beneficio será íntegro para Intermón tanto si se compra ahí como si se compra en la tienda de Sevilla que será donde esté físicamente. Me gustó Intermón por eso porque tienen sus propias iniciativas solidarias que es como si fueran su propios crowdfunding solidarios. Crean la iniciativa y la gente va metiendo dinero para un proyecto concreto o de manera abierta para lo que considere la gente de Intermón

Has logrado la financiación para “Desaprendiendo” ¿ahora qué?
Ahora quedan 18 días hasta el 24 de marzo a las 6 de la tarde que se puede seguir metiendo dinero. Yo al principio cuando redacté el proyecto en la plataforma de Verkamin dije que si superábamos la cantidad de 1.950 euros, una cosa que para mí era impensable y que veía muy lejos por eso estoy ahora tan contento de haber llegado tan rápido, podríamos hacer 1.000 copias en lugar de 500 copias del cd. Pero después, a lo largo de estos días yo he pensado siendo realista que 500 copias eran una barbaridad que difícilmente se vayan a vender y creo que sería un dinero tirado que le puede hacer falta a alguien. Entonces si se consigue ese dinero de más puede ir directamente a esa iniciativa solidaria de Intermón. Prefiero eso, así que iremos recaudando dinero hasta el día 24 de marzo y todo lo que exceda de lo que yo me gasté en el disco, lo cuál ronda la cantidad que pedí, irá directamente a Intermón. Igualmente con la venta del disco también se recaudará una cantidad para la ONG, y aunque espero que sea mucha no habrá mucha gente que compre mi disco ya que en principio quién me ha apoyado lo va a tener por lo que ya veremos cómo funciona la historia.

No has pedido el total de los gastos. ¿Qué inversión has realizado tú y con qué apoyos has contado?
Aquí es muy importante hacer saber que en la inversión personal no se está usando el dinero, gran problema de la sociedad en la estamos, en este caso es un intercambio. Igual que en el disco anterior, “Delirios de flaqueza”, Ismael fue también el productor del disco. Sí, lo pague aunque me hiciera mejor precio en su estudio porque es amigo mío, pero lo pagué, éste es un compromiso de él conmigo dado que yo he hecho trabajos audiovisuales a él y su grupo actual con Vicky Luna, Chez Luna, en algunos conciertos, por lo que me devuelve con su trabajo mi trabajo anterior. Es un acuerdo, él me está grabando en su estudio, él me está arreglando los temas pero claro, yo voy a tener que pagar a músicos que no tienen conmigo ningún tipo de compromiso, aunque sí me van a hacer un mejor precio por la historia solidaria que en sí tiene el proyecto. Principalmente el coste mayor que en sí es la producción del disco, grabación y el trabajo del productor musical y la fabricación va en parte financiado por la participación de Ismael y por otra parte por el crowdfunding. Personalmente yo en este disco no me estoy gastando dinero y espero que siga así porque no lo tengo [risas].

Fotografía realizada por Antonio Falcón

Además de a los mecenas, ¿a quién le vas a dedicar el disco?
Aparte de lo típico de a mi familia, que siempre están ahí apoyando, a la gente que ha apoyado la iniciativa y a los que no están de los que nos rodeaban. Algún amigo músico que murió, a gente como mi cuñado que estaba siempre pendiente de mi música, y evidentemente hay un hueco muy importante en la dedicatoria a las personas que van a hacer posible que el disco salga físicamente. 

¿Cómo definirías al músico Antonio Amuedo?
Hubo un tiempo en el que no me consideraba músico, pero me lo hicieron corregir aunque aún me suena muy grande la palabra porque conozco buenos músicos que sí se dedican a la música plenamente. Pero bueno, sí es verdad que yo hago música, hago canciones y por lo tanto dicen que si hago música soy músico, pero no me considero músico porque no domino ningún instrumento ni domino la música ni el lenguaje musical por lo que parto de la base que me viene muy grande esa palabra ya que conozco a músicos muy buenos que tengo muy cerca y no sé definirme. Yo lo hago por hobby, me siento bien haciendo canciones, me siento bien cantando, me gusta cantar, seguramente incluso más que hacer las canciones, por lo que no sé como definirme, soy lo que soy. Ahora me estoy planteando porque en estos 20 años no me dediqué más tiempo a la música, a aprender más el instrumento de la guitarra u otros instrumentos como el piano, que siempre me ha llamado mucho la atención, porqué no dediqué más tiempo a eso. Seguramente no lo he tenido pero durante un periodo grande si siquiera me ha interesado mucho y he ido y venido y me han decepcionado cosas que pasan en este mundillo de la música por lo que te vienes un poco abajo con el tema. He tenido momentos en los que gente importante como el compositor santanderino Juan Carlos Calderón, que murió hace poco tiempo, se interesó por mi música, mandó mis cosas a alguna de las multinacionales aunque eso no fue a ninguna parte por que a ellos no les interesa este tipo de música, pero en ese momento que te ilusionas, que después te vienes abajo, y en todas esas subidas y bajadas ahora me hubiera gustado haber aprovechado mucho más todos estos años para realmente poder considerarme más músico en cuanto a tocar un instrumento o a saber más de lenguaje musical.

¿Qué te ha dado la música que no hayas encontrado en otra faceta de tu vida?
Podría decirte que reconocimiento pero la verdad es que me siento reconocido en otras facetas también. [...] Creo que la más importante es la satisfacción de ponerte delante de la gente y cantar y tener la respuesta directa de gente desconocida, ya que es fácil que a mi madre le guste lo que canto [ironizando], pero que gente que no te conoce venga y te felicite es muy reconfortante ya que reconocen lo que estás haciendo y que además es una cosa en la que tú te dedicas de casualidad, que no es algo a lo que le hayas puesto un empeño bárbaro. Por eso te decía que me hubiera gustado ponerle más empeño porque ahora  mismo me encantaría que mis hijos empezaran a estudiar algo música, porque a mi me hubiera gustado y aunque nunca es tarde, de echo ahora es cuando mejor toco la guitarra, y es cuando más metido estoy en el tema de aprender realmente y de ponerme mis retos dificultosos con la guitarra como para progresar más de lo que he hecho antes.

Fotografía @jllpaneque  


La imagen del cantautor está vinculada a la del músico comprometido que con palabras y su guitarra realiza una crítica social al sistema, los políticos o a la sociedad ¿a quién das caña en tus letras de “Desaprendiendo”?
La canción que da título al disco es de las más recientes que he compuesto y aunque la canción habla del sistema educativo que tenemos, dando caña al sistema educativo que tenemos que yo considero que es lamentable y que cada político que entra lo cambia, pero por otro similar, no cambia para potenciar otros tipos de educación como la educación en casa o la educación libre, que aquí en España son alegale. Aquí con este sistema se pretende hacer borregos todos iguales unos detrás de otros y esa es una lucha con los maestros que mandan deberes y tienen a nuestros hijos invirtiendo toda una tarde haciendo deberes. Es como si nosotros terminásemos nuestra jornada laboral y tuviéramos que hacer tres o cuatro horas más en nuestra casa de lo mismo. Contra todo ese sistema que lo único que pretende es tratarlos a todos por igual aunque vayan bien en todas las asignaturas de clase. Como no puede haber discriminación terminan haciendo más deberes para hacer a todos los alumnos iguales, lo cuál es lo que pretende el sistema y alienarlos, como digo yo en la canción, haciendo una manada de borregos que después no tengan capacidad de responder a las barbaridades que hacen los que dirigen el país, como está pasando ahora. Es más fácil para tenerlos sentandos delante de la tele a ver cualquier programa de mierda precisamente por la educación que han obtenido. Si hubiesen tenido otro tipo de educación, seguramente esa posibilidad de cada uno de evolucionar en lo que le interesara, aunque fuese hacer punto. A cada uno tiene que dejársele la libertad y lo que hacemos con los niños es coartarles la libertad y llevarlos a todos por el mismo sitio para que todos den la misma respuesta después cuando sean adultos, que es ninguna. A eso le hablo en la canción “Desaprendiendo”. En lo cotidiano reivindico mi forma de hacer canciones con respecto a la gente que lo puede criticar, en límites pequeños [con ironía], lógicamente a mí nadie me critica porque no soy conocido, pero la gente que en la cercanía dice “¿éste que está siempre haciendo canciones de corte social y tal?”. He hecho una canción que se llama “Oxígeno robado” que va sobre la gente que no hace huelga en los entornos laborales porque se supone que le duele mucho el bolsillo, como si a los demás no nos doliera lo que nos quitan por un día de huelga, pero que después se benefician de lo que conseguimos los demás. Hay otra que se llama “Todo está en el aire” que voy a cantar con Vicente Feliú, que es uno de los trovadores que fundó La Nueva Trova Cubana junto a Silvio Rodríguez y Pablo Milanés, y la canción va sobre la crisis y todo lo que hemos vivido y cómo deberíamos salir a la calle y cogerlo, y lanzárselo a los que nos lo están tirando encima. Otra canción, “Arropado”, es una canción de amor propio creada en un momento de bajón. El disco termina con una nana a mis niños. En fin, que hay matices de amor pero la mayoría de las canciones son de contenido social.